Yo creí que la cuestión de la calvicie como estigma social o indicador de carácter, era un tema desterrado.

Pero parece que no es así. A mí me resulta extraño, porque no soy calvo, y por genética, parece que tampoco lo seré, pero, tengo amigos calvos, a los que más o menos en broma mencionan el tema, pero nunca me dio la impresión que les importara demasiado.

Sobre todo, cuando no sé a qué inteligente se le ocurrió transformar la calvicie en un estilo, y comenzaron los adolescentes a pelarse ex profeso, y comenzaron a querer parecerse a actores que se subieron a la onda, como el actor Din Vincel (¿se escribirá así?), con el que las mujeres se pirran, porque la calvicie de algunos parece que es “masculina”, haciendo que los que no somos calvos, la emprendamos con raparnos a ver si tenemos suerte que nos confundan con uno como ese.

Claro que los músculos, para algunos, hay que imaginarlos.

Parece que no pasó la moda de preocuparse por la calvicie, y las investigaciones siguen, y lo que es más interesante es que hay nuevas teorías, y ahora con sustento.

Las nuevas investigaciones dice que la calvicie tiene que ver directamente con los intestinos, que allí se gesta el compuesto químico que estimula el crecimiento capilar.

Qué fácil resultó, al final.

O yo estoy demasiado tonto, o desde que el mundo es mundo se sabe que todo lo que nos pasa tiene que ver con la comida, o acaso nadie escuchó el dicho: somos lo que comemos.

¿Veámoslo al revés, el informe insinúa, si mal no entiendo, que todos los calvos comen lo mismo?

Bueno, dicen que está ese componente del estrés, pero es lo mismo, ¿alguien conoce a uno que no esté estresado, sea pelado o no?

Espero de verdad, por mis amigos, por la humanidad que no sé por qué le asigna al pelo tanta importancia, cuando la evolución nos lo sacó del cuerpo por algo, y se le quedó en la cabeza por retraso, ya que la tendencia es a que desaparezca, que ese informe sea cierto y de una buena vez, comencemos a revisarnos otros defectos para canalizar el estrés, porque no creo que eso desaparezca por tener pelo.

Dicen los científicos que mediante el bloqueo de una hormona, ligada al estrés (esta es la afirmación que me causa escepticismo)  y a la pérdida del cabello, la recuperación total del pelo es inmediata.

La verdad, no sé si es porque el informe que leí tiene una redacción simplista (probablemente como este), pero la cosa no pinta como cierta, o como posible.

Lo que sé seguro, que será millonario el dueño de la patente del método, ya que estoy seguro que todos van a salir a comprar la aplicación del método, apenas salga para humanos.

El procedimiento está en manos de investigadores de la Universidad de California, Los Ángeles.

Lo que creo es que es curioso que a pesar que muchísimos adolescentes y jóvenes sacrificaron sus cabelleras, por moda o “estilo”, hasta convertirlo en vicio,  que la calvicie siga siendo un símbolo de envejecimiento es porque lo que es irremediable no es la calvicie, sino la humanidad.

Aunque así fuera, lo que se estigmatiza en realidad es la vejez, y todos tenemos ese prejuicio con la vejez, los jóvenes, los trabajos, las empresas son las que contribuyen a esa estigmatización, no creo ni por un momento que el tener pelo cambie las cosas.

Ojalá me equivoque.

El compuesto se hace llamar obscenamente astressin-B.

Veremos qué pasa con luego con la comercialización del procedimiento, dicen que en pocos meses se recupera todo el cabello.

Ya veo la cola que se va a armar para probar el jugo de falsa juventud.

Para cuándo la cura del SIDA.